domingo, 29 de noviembre de 2020

Concurso de tarjetas navideñas de nuestro instituto

 Como ya es habitual, os volvemos a convocar en estas fechas para el habitual concurso de tarjetas navideñas que este año viene con novedades, como podéis comprobar en las bases:




XV Concurso literario IES "Santa Engracia"

 Desde este instituto de Linares hemos recibido la convocatoria de su tradicional certamen literario. Animaos y participad.






martes, 18 de febrero de 2020

Los alumnos de 1º ESO A se inventan los diálogos de un cómic

Tan fácil como eso: repasando los conceptos básicos de la conversación, les invitamos a que rellenen los bocadillos de esta sencilla historieta. El resultado es el que sigue, donde hay soluciones previsibles frente a otras más originales, incluso las que no pueden sustraerse a la realidad que nos rodea.




















viernes, 14 de febrero de 2020

Alba Viejo García, Carol dice.

Alba, nuestra profesora de Filosofía, acaba de publicar una novela que lleva por título Carol dice. Ya mismo la tendréis a vuestra disposición en la biblioteca del centro y, por supuesto, en las principales librerías de España. 

Esto es lo que podemos desvelar hasta ahora de esta publicación, creada con cariño por su autora: "Narrada a cinco voces, la historia desvela las vivencias, decepciones y primeras irrupciones de amor que irán tejiendo las existencias de un grupo de amigos conformado desde la adolescencia. Casi cuarenta años después, Carol se reunirá con la hija de quien fue su mejor amiga: en mitad de un café alejado ya de la Francia de su juventud, se confiarán las últimas palabras".

Enhorabuena a nuestra compañera y profesora. Próximamente anunciaremos la presentación de la obra dentro del programa "Aula Abierta" del instituto.



lunes, 10 de febrero de 2020

Continuando la historia

Ante la lectura del tema seis de su libro de texto, se ha planteado al alumnado de 1º ESO A que continúe
la historia de fray Perico y el Empecinado. Os dejamos el fragmento de texto sobre el que han trabajado la comprensión lectora y, a continuación, una amplia gama de finales, seleccionados de entre todos aquellos que han sido presentados.




CONTINUACIÓN 1

Empezaron a discutir y el rey vino.
  • ¿Qué es todo este jaleo?
  • Te están robando la leña.
  • No la estamos robando, la cogemos prestada.
  • No, la leña es mía. Y nadie me la roba.
    Justo pasó por ahí la princesa Elena, la hija del rey.
  • A ver papi, la leña la puedes compartir, que por poco no te va a morir.
  • ¡Vale, hija!
  • ¿Por qué no los invitas a merendar? Vienen de muy lejos.
    El rey aceptó y se fueron todos a merendar felices.

(Marina García Garrido)


CONTINUACIÓN 2

  • Vale, está más o menos pasable, pero no podéis llevaros la leña.
  • ¿Cómo que no?- exclamó fray Perico.
  • Pues como que no: esa leña es del rey. ¡No os pertenece!
  • ¡Sí nos pertenece: nuestro burro, nuestra leña!
  • Ay, en cuanto al burro... sospechamos que sea robado.
  • ¡No es robado!
  • Bueno, eso habrá que verlo. Si alguien reclama un burro desaparecido os culparé a vosotros.
  • Pero nosotros...
  • ¡De nosotros nada!- interrumpió el guardia.
  • ¡Marchaos, muchachos! ¡Y andad con cuidado, mucho cuidado!
    Dejaron la leña ahí y se marcharon. Más tarde llegarían a una posada donde descansaron. Pero fray Perico no podía descansar.
  • ¡Esto es inútil! ¡Debemos ir ya a por los franceses!
  • Paciencia, pronto iremos... pero debemos descansar.

(Manuel Barea Granados)


CONTINUACIÓN 3

Entonces terminaron de que les registraran las alforjas y fray Perico y el Empecinado le propusieron a la Santa Hermandad que no le dijeran nada al rey, ni les multaran. A cambio, ellos les darían la mitad de la leña. El corregidor dijo que eso era muy poco, que algo más. Bueno, entonces fray Perico les propuso otra cosa: que también les daban una buena comida en Aranda de Duero. Y el corregidor estuvo hablando con los demás guardias y al final aceptaron.

(Lucía Pérez García)





CONTINUACIÓN 4

La Santa Hermandad se llevó a fray Perico y al Empecinado al palacio real. Allí el rey les dijo que por robar su leña, eran condenados a muerte.
Justo en el momento en el que iban a ser ahorcados, algo increíble pasó. El burro, saltó a la plataforma donde fray Perico y el Empecinado iban a ser ahorcados, y empezó a dar coces, provocando que los guardias se desmayasen y rompiendo las cuerdas que tenían atadas. Los dos se subieron al burro y este empezó a correr muy rápido, dejando atrás el reino.

(Alejandro Aragón Rojas)



CONTINUACIÓN 5

Mientras hablaban, de repente, se escuchó una voz grave:
  • ¿Qué pasa aquí? ¿Quiénes son estos? -dijo el rey.
  • ¡Oh, majestad! Estos son unos muchachos que vienen a dejar leña -explicó.
  • ¡Hola, su majestad! -dijo fray Perico. ¿Podríamos dejar esta leña?
  • Sí, claro... -dijo, sospechando el rey.
  • Gracias, majestad.
  • Pero, esperad... ¡Ese burro! -exclamó.
  • ¿Qué? ¿Qué pasa con el burro?
  • ¿Que qué pasa? ¡Que es robado!
  • Pues claro que no -dijo fray Perico preocupado.
  • ¡No le mientas a tu rey! -gritó.
  • ¡Nos van a ahorcar!
  • Pues claro. Recoged la leña y traed a los chicos al palacio. Dentro de poco ya no volverán a robar -dijo enfadado.

(Luna Castillo Soeters)




CONTINUACIÓN 6

Ellos cuando ya lo habían registrado les hicieron a fray Perico y al Empecinado una propuesta:
  • Os haremos una propuesta -dijo uno de los alguaciles, con un tono de voz algo alto y grave.
  • ¿Sí? ¿Cuál?
  • Os llevaréis la leña a Aranda de Duero, pero antes iréis a disculparos al rey.
  • ¡Vamos! -dijo fray Perico.
  • ¡Venga! ¿A qué esperáis? -replicó el Empecinado.
  • ¡A mí no me repliques ni subas el tono!
Todos ellos se fueron hacia donde estaba el rey.
  • ¡Hola, mi majestad! -dijo fray Perico.
  • ¡Hola, fray Perico! ¿Qué sucede?
  • Mire, mi majestad. Nosotros habíamos venido de Salamanca hasta aquí con el asno para coger leña y después ir hacia Aranda de Duero, pero antes de irnos nos dio el alto la Santa Hermandad -trató de explicar el Empecinado.
  • ¿A coger leña? -preguntó el rey.
  • Sí.
  • ¿Y... para qué queréis la leña?
  • Mire, necesitamos leña para poder refugiarnos en nuestro molino y con la leña, hacer una hoguera.
  • ¿Una hoguera? ¡De eso nada! -golpeó con fuerza el rey una mesa que se encontraba frente a él. La leña se queda aquí.
    Los dos amigos asintieron con la cabeza, se dieron la vuelta, se montaron en el burro y se fueron más firmes que un palo.


(Daniela García García)

jueves, 23 de enero de 2020